En los últimos años, muchas organizaciones han puesto en práctica políticas de Responsabilidad Social Empresarial (RSE), con el objetivo de contribuir al mejoramiento de las sociedades para las que trabajan: sumarse a causas benéficas o contribuir con el medioambiente, son algunas de las acciones que las compañías suelen hacer para mejorar la imagen que la población percibe de ellas.

De todos modos, si bien varias hacen hincapié en esta actividad, aún no está completamente desarrollada. Esto se puso de manifiesto en el RepTrak 2017, donde se analizó la reputación de las corporaciones a través de siete dimensiones racionales: productos y servicios, innovación, lugar de trabajo, directiva, liderazgo, performance y vínculo con la ciudadanía. En este último indicador, paradójicamente, las tres primeras del ranking obtuvieron su peor resultado.

Rolex, la marca que quedó en la cima con un puntaje promedio de 80,38, apenas alcanzó los 69,03 en la categoría Citizenship. Sus puntos fuertes fueron los productos y servicios (84,66) y la performance (80,62).

Lego, por su parte, también estuvo por debajo de su media en el rubro que reconoce a las organizaciones partidarias de las buenas causas y que contribuyen positivamente a la sociedad. En este parámetro obtuvo 72,71 unidades, un poco menos que The Walt Disney Company —la tercera— que consiguió 72,77. En el ranking general, estas firmas registraron 79,46 y 79,19, respectivamente.

La compañía que se destacó en el vínculo con la ciudadanía fue Google. De todos modos, los 73,49 puntos que sumó la multinacional aquí representan la cantidad más baja con la que una empresa se impuso en una dimensión.