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RSE 12.04.2017 | LATINOAMéRICA | DIRECTOR DE ASUNTOS LEGALES Y CORPORATIVOS DE KIMBERLY-CLARK PARA LA REGIÓN AUSTRAL DE LATINOAMÉRICA

Fernando Hofmann: “Hoy la ética está en el centro de todo”
“Como país estamos en camino hacia una sustentabilidad transversal a todas las áreas de trabajo”, asegura el director de asuntos corporativos.

Fernando Hofmann: “Hoy la ética está en el centro de todo”

Con motivo de los 25 años de Kimberly-Clark Argentina, la empresa lanzaróla campaña “Viví presente”. Hofmann cuenta por qué era necesaria una campaña así y qué importancia tiene para ellos el compromiso con la sociedad. También opina sobre los cambios del paradigma en sustentabilidad.

Hace casi la misma cantidad de años que Fernando Hofmann trabaja en Kimberly Clark que los que lleva la empresa en la Argentina. Además, Hofmann es el presidente del CONARP (Consejo de Autorregulación Publicitaria), tiene un MBA de la Universidad Torcuato di Tella y es abogado recibido en la Universidad de Buenos Aires.

—¿En qué consiste la campaña Viví presente de Kimberly Clark? ¿Cuáles son sus objetivos?
—Esta campaña marca un momento de inflexión para nosotros. Desde hace 25 años estamos presentes en la vida de los argentinos, con nuestras marcas y productos. Pero también con innovación constante, inversiones de más de 600 millones de dólares, formación de talento, compromiso con la comunidad y con el ambiente. Son 25 años de acompañar al país y a los argentinos en cada etapa, contribuyendo a mejorar su calidad de vida. Es justamente desde este propósito que surge la campaña: una invitación a reflexionar sobre cómo estamos presentes con nosotros mismos, atentos a nuestros sentimientos, a lo que nos pasa, y cómo estamos presentes con nuestros vínculos cercanos, y con la comunidad. Viví presente es, fundamentalmente, un llamado a la acción, a reconocernos a nosotros mismos en relación con los demás: ser partícipes, estar atentos, en conexión real, ser protagonistas.

—¿Qué importancia tiene para una empresa aportar valor a la sociedad?
—Nuestro crecimiento viene de la mano de la comunidad, y viceversa. No lo concebimos de otra manera. Como empresa y parte del tejido empresarial local, tenemos un compromiso con el desarrollo sostenible y con la comunidad, que en nuestro caso están en sintonía con los objetivos de desarrollo sostenible. Es mirar hacia el futuro, hacia delante, con el horizonte de promover la salud, la higiene y el bienestar de las personas, fomentar la producción y el consumo responsables. Es, como decimos desde nuestra campaña, estar presentes y ser miembros activos de la sociedad, adoptar un nuevo rol y empoderarse de él para alcanzar grandes metas. Desde Kimberly-Clark brindamos productos esenciales para una vida mejor. Para ello trabajamos todos los días. Nuestros colaboradores, clientes, proveedores, la comunidad y nuestros productos de alta calidad para la higiene y el cuidado personal son parte de este cambio positivo que queremos generar e instaurar en el país. Además, tenemos en marcha iniciativas a largo plazo, sostenibles, enfocadas en los ejes de salud, educación y medio ambiente, desde donde también estamos buscando hacer una diferencia positiva.

—En una nota declaró que hay un cambio de paradigma en materia de sustentabilidad. ¿Puede ampliar esta declaración?
—La sustentabilidad ha cambiado de ser algo simplemente normativo, o una declaración de buenos propósitos, a ser una realidad que además de los aspectos económicos, sociales y ambientales, incluye o debe incluir una nueva forma de ser y pensar la estrategia de negocios, donde la ética está en el centro de todo. Ahí está el gran cambio de modelo, esa nueva forma de pensar y pensarnos que inaugura en los negocios una ética del desarrollo haciendo lo correcto. Y en la comunidad, una nueva forma de convivencia. En el centro de todo está la dignidad humana, el progreso en la calidad de vida de las personas, la corresponsabilidad. De este modo, creo que es un compromiso que tiene que ser visto por todas las áreas de trabajo en una sociedad (la articulación público-privada), como también internamente desde todas las áreas de la empresa.

—¿Cómo cree que está posicionada la Argentina en términos de políticas sustentables?
—Estamos en un proceso de adaptación nacional a los objetivos de desarrollo sostenibles por la ONU. Se ha dado un paso importante a nivel global y considero que la coordinación por parte del gobierno aportará positivamente a su implementación y bajada también en el ámbito corporativo. Como país, estamos en camino hacia una sustentabilidad transversal a todas las áreas de trabajo, logrando alinearnos cada vez más a las tendencias globales. Es una transformación que lleva su tiempo, pero que con la labor en conjunto y sincronía podremos establecer nuevos parámetros de sostenibilidad que nos lleven al progreso que permitirán contribuir al desarrollo económico, promover el desarrollo humano y social y fortalecer las instituciones de la vida pública argentina para los próximos años.

—¿Qué características o valores hacen que usted, después de dos décadas, siga eligiendo trabajar en Kimberly-Clark?
—Esta elección diaria, donde tanto la empresa como yo nos elegimos mutuamente, tiene que ver con varias cosas. Una de ellas, y la principal, es saber que estoy en una compañía que contribuye a mejorar vidas, con valores que comparto. En Kimberly-Clark se priorizan la integridad, la ética, la sostenibilidad y el trabajo en equipo. Además, a nivel profesional hay siempre una posibilidad de avance, de crecer y de ser artífice, cada uno, de su propia carrera. En estos veinte años me he reinventado, la empresa me ha dado esa posibilidad de seguir ampliando mis horizontes.En Kimberly-Clark tenemos una cultura de management que fomenta el trabajo en equipo, por procesos, y que permite una mayor integración y oportunidades de desarrollo. Una cultura dinámica, ágil y basada en principios constantes, pero con flexibilidad y espacio para que cada uno pueda ser emprendedor y creador de su propia carrera. Somos un equipo y compartimos un propósito: saber que lo que hacemos, nuestros productos, entran en los hogares y mejoran, en definitiva, la calidad de vida de miles de personas. Eso nos hace diferentes y nos empuja a seguir aprendiendo y creciendo en la compañía.

“Viví presente es, fundamentalmente, un llamado a la acción, a reconocernos a nosotros mismos en relación con los demás: ser partícipes, estar atentos, en conexión real, ser protagonistas”, dice Hofmann.