El Super Bowl LVII ha agotado el 95% de su inventario publicitario, según anunció la cadena Fox. A su vez, el anfitrión del Gran Juego de 2023 también informó que ha vendido el 90% del inventario para la temporada regular de la NFL, que comienza el jueves.

Mark Evans, vicepresidente ejecutivo de ventas de Fox Sports, dijo a Ad Age que, en comparación con las nueve transmisiones anteriores del Super Bowl en la cadena, “salimos del mercado inicial más vendidos en el Super Bowl que nunca”, con sólo un “puñado de unidades” restantes.

Una fuente cercana a la negociación dijo que algunas piezas de 30 segundos se vendieron por más de 7 millones de dólares, un nuevo récord para el Gran Juego. Las marcas que invirtieron en patrocinios importantes en toda la cartera de Fox pagaron precios más cercanos a los 6 millones de dólares, en consonancia con los precios del año pasado de la NBC, añadió la fuente.

Fox sigue un nuevo paradigma para la venta de anuncios del Super Bowl que varios compradores de medios dijeron a Ad Age que comenzó el año pasado cuando NBC Universal estableció un calendario más agresivo para las ventas del Gran Juego que cualquier año anterior. Eso significó salir del regateo de las preventas de verano con pocas unidades restantes, en lugar de estar “contentos de que fueran capaces de vender de cinco a diez unidades del Super Bowl en esa ronda”, dijo un comprador.

Para el SB 2022, NBCUniversal anunció que había vendido el 85% de su inventario en julio, mientras que la anterior emisora, Paramount, no había alcanzado el mismo objetivo hasta dos meses antes del inicio. En septiembre de 2021, NBCU dijo que sólo le quedaban unas cinco unidades en el juego.