María Belén Colombo trabaja en Coca-Cola desde hace quince años. Empezó como joven profesional en nuevas bebidas; después pasó a comunicaciones integradas y, de ahí, se fue a estrategia de marcas; luego estuvo en estrategia de nuevas bebidas e innovaciones y desde hace seis años está en su cargo actual. Ahora, recibió el Premio Marketer en la categoría Sub 39.
Colombo destaca la gran pasión que siente por lo que hace y cree que “la clave está en alimentar constantemente las ganas de probar cosas nuevas, sin tener miedo al hecho de no saber todo”. Como habilidad de su labor en estos años en Coca-Cola asegura que busca siempre trabajar con compromiso y perseverancia, “formando grupos de trabajo interdisciplinarios para mezclar el expertise de distintas agencias y lograr juntos campañas de alto impacto gracias al trabajo en equipo, que es lo que sin dudas potencia todo lo que hacemos y nos deja relaciones tan lindas de muchos años”, comenta.

—¿Qué emociones le despierta haber recibido el Premio Marketer? ¿Qué importancia tiene que los colegas sean quienes la eligieron?¿Qué mensaje puede dejarles a futuros colegas?
—Recibir este premio me llena de orgullo y emoción. Es un reconocimiento que de alguna manera valida el trabajo que una emprende día a día con tanta pasión. Y haber sido elegida por colegas es un doble honor: me lleva a mirar hacia atrás y pensar en los vínculos tan lindos que se fueron construyendo a lo largo de los años con todas las personas con las que uno comparte el camino. Creo que ese es uno de los aspectos más gratificantes de esta profesión.

—Estuvo en el CMO Latam Summit. ¿Qué le dejó esta experiencia en particular?
—Fue una experiencia súper enriquecedora. Disfruté muchísimo de escuchar charlas tan inspiradoras como la de Peter Fisk y, sobre todo, de aprovechar un espacio que te da la oportunidad de generar un intercambio con otras personas de la industria, sean de agencias o de empresas. Me llevo muchas reflexiones de los debates que se fueron dando.

—Alguna vez dijo que “cambió la forma de contactar al consumidor: está con multitasking constante y uno tiene que ser mucho más disruptivo para llamar su atención”. ¿Puede ampliar esta idea?
—Estos cambios que mencionaba están directamente relacionados con las nuevas tecnologías de la información y la comunicación. Las redes sociales y los teléfonos nos dieron la posibilidad de estar conectados permanentemente. Esto incrementó el multitasking y la velocidad e instantaneidad de las cosas. El hecho de que una persona esté mirando televisión y al mismo tiempo esté con el teléfono en la mano chequeando sus redes sociales, respondiendo mails laborales y chateando con varias personas en simultáneo nos obliga a ser más disruptivos que nunca para lograr capturar la atención de este consumidor que está con dos o tres pantallas a la vez recibiendo un enorme caudal de mensajes e información. Con disruptivo me refiero a tener un mensaje personalizado para cada consumidor, o un mensaje más genérico pero de alta relevancia cultural o con un punto de vista moderno, diferencial, social. Por otro lado, esta inmediatez forzó la necesidad de generar contenido en tiempo real. El desafío ahora se trata de acompañar ese ritmo vertiginoso y adaptarnos rápidamente a las nuevas demandas, con contenidos novedosos, innovadores y disruptivos para mantenernos relevantes, buscando siempre generar conversaciones de calidad y en sintonía con lo que nuestras audiencias quieren, con un insight mucho más relevante. En ese camino estamos.