Ticinese trabaja desde hace más de veinte años en Cervecería y Maltería Quilmes. Ingeniero industrial por la Universidad de Buenos Aires, en sus dos décadas en la empresa formó parte del área de marketing y estuvo a cargo de las principales marcas del grupo: entre otros logros, lideró los lanzamientos de Quilmes Clásica y Andes Origen. Además estuvo al frente del negocio en Chile como gerente general; fue VP del negocio sin alcohol; BU head para Paraguay, Uruguay y Chile; y VP de marketing para Latinoamérica Sur.

―¿Cuáles son sus expectativas sobre la nueva edición de Effie Awards Argentina?
―Ante todo recibo esta edición con gran orgullo y muy agradecido por darme la oportunidad de presidir el jurado de tan prestigioso acontecimiento, junto a colegas que respeto y admiro. Effie Awards representa el reconocimiento a las buenas ideas y a la creatividad, pero además a su impacto en los negocios. Y, en línea con esto, lo que espero con mucho optimismo para este año es poder ver ideas y trabajos que reflejen una mirada centrada en el consumidor y en los clientes, que ayuden a reactivar los diferentes mercados, con marcas que hayan logrado entender y acompañar la situación por la que pasaron los consumidores. Fue un año muy duro para todos, que requirió de mucha creatividad, enorme resiliencia y altísima velocidad de adaptación. Realmente deseo que este sea el último año que pasemos por una situación así. No cabe duda de que va a ser un año que recordaremos siempre.

―Desde su experiencia, ¿cuáles han sido las herramientas más innovadoras en los últimos tiempos al servicio de las comunicaciones de marketing más efectivas?
―Es difícil definir una única herramienta como la más influyente. Pero sin dudas el gran fenómeno de estos tiempos es la captación, la capitalización, el entendimiento y el uso creativo de la data. Hoy existen distintos desarrollos de plataformas, nuevos medios, hasta incluso nuevos sistemas que nos permiten tener mucha más cercanía con el consumidor. En Cervecería y Maltería Quilmes el consumidor está en el centro de todas nuestras decisiones. Hace varios años que el acceso a la data nos permite ser mucho más precisos y ágiles a la hora de entenderlos para traducirlo en soluciones comunicacionales o tecnológicas, y hasta incluso en innovaciones de producto. La era del marketing 1:1, la era de romper con los silos de marketing tradicionales, la verdad que es un fenómeno que no se puede traducir en un único desarrollo, sino más bien en una artillería de innovaciones que nos han permitido estar más cerca que nunca de la gente, para seguir construyendo marcas amadas. Creo que lo fundamental es conjugar todo este entendimiento de la data con el contacto real con la gente, desarrollando una ciencia creativa que no pierda de vista la importancia de estar cerca de la gente, de no basarnos sólo en datos objetivos, sino en las sensaciones y sentimientos que genera esa cercanía. La suma de ambas partes es lo que nos permite ofrecer propuestas más efectivas en cualquier tipo de comunicación de marketing.

―¿En qué lo ayudó y en qué no ser un especialista en marketing en su camino a la presidencia de una compañía?
―Si bien mi formación académica es ingeniería industrial en la Universidad de Buenos Aires, carrera y universidad que me enorgullecen y me pone muy contento haber elegido, creo que lo que me ayudó a llegar hasta acá fue tener un buen equilibrio entre la capacidad analítica y una estructura de pensamiento combinada con la sensibilidad para poder entender y estar cerca de la gente, teniendo siempre muy en claro que todo se logra en equipo. Creo que toda decisión de negocio debe empezar por poner al consumidor en el centro y creo que esto es la esencia del marketing.