Quiddity, parte del ecosistema Untold, realizó una investigación para Fundación Avon para dar a conocer la Ruta crítica que recorren las mujeres que viven situaciones de violencia de género.

Marketers by Adlatina: ¿Cómo fue el proceso de recolección de datos, la metodología usada? Dado que crearon una nueva herramienta, y además armaron un ambiente cómodo para las entrevistadas.
Verónica Rodríguez Celín: Si bien nuestra manera de trabajar siempre es desde la empatía, la escucha activa y la consideración de la persona, este proyecto fue muy distinto a otros en varios aspectos. Ya desde el armado de la propuesta nos centramos en la capacitación del equipo interno tanto de la mano de Fundación Avon como con referentes en el área en cada uno de los países en donde trabajamos. Allí entendimos que nos enfrentábamos a un desafío en cuanto a cómo armar nuestras herramientas de recolección, cuál era la mejor manera de abordar cada uno de los puntos, cómo indagar en las problemáticas sin caer en la revictimización de aquellas mujeres que habían pasado por un hecho de violencia. Priorizamos siempre la contención y la confidencialidad, pero a la vez pudimos destacar la importancia que tenía la participación de cada una en esta investigación. También nos pareció muy importante contar en cada país con una institución especializada en acompañamiento a víctimas de violencia de género que esté a disposición para recibir a las mujeres y contenerlas. Por eso, al finalizar cada encuesta o entrevista pudimos brindarles ese contacto para que lo tuvieran, medida que fue muy agradecida y utilizada por varias de las mujeres.

MbA: ¿Qué datos fueron los que más les sorprendieron?
Ana Inés Álvarez: El informe nos permitió generar estadística relevante para el abordaje y concientización de la violencia por motivos de género y el impacto que las respuestas institucionales tienen en el pedido de ayuda de aquellas mujeres. Si bien es una estadística que las organizaciones sociales que abordan dichas problemáticas perciben cotidianamente en los relatos de las mujeres, es fundamental que podamos generar datos que empiecen a posicionarse como herramientas clave para la generación y mejora de las políticas públicas. Si tuviéramos que hablar de datos que nos llamaron la atención, me parece relevante destacar que menos de la mitad de las mujeres que atravesaron una situación de violencia de género, la reconocieron como tal. Esto nos invita a reflexionar en la importancia de seguir concientizando sobre las formas en que ésta se ejerce sobre las mujeres y los diversos ámbitos en los que ocurre. A su vez, nos parece importante recordar que 7 de cada 10 mujeres consideran que tener personas a cargo es un desafío adicional a la hora de pedir ayuda. Las razones señaladas van desde no saber con quién dejar a cargo a lxs niñxs (16%), sentir que el vínculo se podría ver afectado negativamente (14%) o sentir que las personas a cargo iban a estar en peligro si pedía ayuda (11%).
VRC: La realidad es que por otros estudios o, incluso, por percepciones que nos atraviesan como mujeres, nos imaginamos que ciertos indicadores serían altos, pero nos dolió mucho poner en números reales la alta incidencia de violencia psicológica que declaran haber vivido muchas mujeres por su condición de género, en donde 6 de cada 10 dicen haber recibido insultos, ofensas y maltratos, y en la misma proporción sintieron que sus opiniones no fueron tomadas en cuenta. También nos parece muy importante destacar que solo el 50% de las mujeres que pasaron por un hecho de violencia doméstica se atreven a hablarlo con su círculo primario: familia, amigas. Este es un dato que nos involucra a todos ya que todos somos parte de la Ruta Crítica.

MbA: ¿Cuál es el objetivo por el cual decidieron investigar y publicar este tipo de información?
VRC: Creemos que visibilizar estos datos contribuye a reflexionar y abrir canales de diálogo como sociedad, pero también de cambio. Los datos tienen que ser el punto de partida que nos permita reconocer la problemática porque todos somos parte, de alguna forma.
AIA: El acompañamiento que realizamos en esta temática desde Fundación Avon y la alianza que venimos desarrollando con organizaciones sociales que trabajan la primera línea de atención de situaciones de violencia por motivos de género nos permitió visibilizar una serie de barreras que limitaban y/o obstaculizaban el acceso a los sistemas de asistencia institucionales.
Convocamos a Quiddity para desarrollar un estudio exploratorio que nos permitiera generar datos y así visibilizar las dificultades en la transitabilidad del proceso de salida de la situación de violencia que viven, llamado Ruta crítica. Así, decidimos buscar aquellas barreras que usualmente enfrenta una mujer que se encuentra en situación de violencia al momento de pedir ayuda. Esas barreras pueden ser internas (responden a su posibilidad de pedir ayuda), como también externas (lo que hacen las personas que forman parte de su entorno más cercano). También depende de cómo responden a su pedido de ayuda, y las herramientas con las cuales cuentan para abordarla y contenerla. Poder tener estos datos nos permite contribuir, en conjunto con las demás organizaciones sociales, al trabajo de concientización y sensibilización respecto del rol que ocupamos cada una de las personas de la sociedad y la responsabilidad que tenemos en ser parte de la red de contención.

MbA: ¿Consideran que hay algunos países de la región más avanzados que otros en cuanto a la lucha contra la violencia de género?
AIA: Cuando hablamos de violencia de género, es importante reconocer el contexto de cada uno de los países de la región. En este sentido, no podemos hablar de países más o menos avanzados, sino de países con mayor reconocimiento de la problemática y, como respuesta de eso, con mayores herramientas legislativas y de abordaje institucional. Estos cambios se suceden a partir del reconocimiento social de la problemática como tal, fuertemente impulsada por el movimiento de mujeres, por lo que es fundamental fomentar y ampliar el diálogo social e involucrarnos.
VRC: Los valores que nos encontramos son relativamente parecidos en los cuatro países en los que trabajamos. Algunas diferencias las vemos en el análisis cualitativo y están muy relacionadas con el avance de los movimientos y organizaciones de mujeres que llevan adelante la visibilidad de estas problemáticas. 

MbA: El informe ayuda a difundir y a concientizar ¿qué otras formas piensan o qué otras acciones hacen para concientizar sobre la temática?
AIA: Desde Fundación Avon llevamos adelante acciones que contribuyen al cambio cultural que necesitamos frente a este tema. Es por ello que llevamos adelante acciones que contribuyan al cambio cultural. Una de las acciones es capacitaciones en violencia de género y Primera escucha para empresas y organizaciones de la sociedad civil que quieren sensibilizar a sus equipos. Argentina a partir del año 2022, puso en vigencia el convenio 190 de la OIT, el cual es una de las primeras normas internacionales del trabajo que proporcionan un marco común para prevenir, remediar y eliminar la violencia y el acoso en el mundo del trabajo, incluidos la violencia y el acoso por razón de género. Nos convocan para poder planificar, y cocrear capacitaciones para poder abordar en materia de prevención y la vinculación de los protocolos de actuación al momento de presentarse una situación de violencia. Campañas de concientización para visibilizar la violencia que atravesamos las mujeres, niñas y disidencias en fechas claves, tales como el 3 de junio, en el marco de Ni una menos y el 25 de noviembre, el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Desarrollamos comunicacionalmente mensajes claves en materia de prevención de violencias con contenido informativo y educativo como la guía informativa sobre violencia de género, y campañas audiovisuales como Hagamos red, surgida y diseñada a partir de los hallazgos de la encuesta realizada con Quiddity. Además, hacemos red con otras organizaciones que trabajan con mujeres que viven violencia. Brindamos acompañamiento integral a mujeres que se encuentran en situación de violencia. Apoyamos a organizaciones de la sociedad civil especializadas en la temática, que brindan apoyo directo a mujeres en situación de violencia.