La encuesta EY CEO Outlook Pulse analiza cómo los chief executive officers globales, incluidos los de México, están abordando un entorno empresarial cada vez más complejo, caracterizado por disrupciones tecnológicas, tensiones geopolíticas y un aumento en las exigencias regulatorias. A pesar de estos desafíos, muchos líderes empresariales están ajustando sus estrategias con un enfoque en la creación de valor sostenible y la adaptación ágil a los cambios externos.

En México, el riesgo político se ha convertido en un aspecto clave de las decisiones estratégicas. Un 43% de los CEOs considera este factor de manera constante en sus movimientos de entrada, expansión o salida de mercados, mientras que el 50% lo toma en cuenta con frecuencia. A nivel global, el 15% de los CEOs reconoce dificultades para mantenerse al día con las disrupciones, lo que puede afectar la competitividad de sus empresas.

En cuanto a las perspectivas de inversión, el 100% de los CEOs en México planea realizar transacciones en los próximos doce meses, lo que refleja su confianza en el mercado y en las oportunidades de crecimiento. A nivel global, México se posiciona como el cuarto destino más atractivo para la inversión, después de los Estados Unidos, Reino Unido y Canadá.

A nivel global, los CEOs están adoptando un enfoque más flexible y proactivo en la gestión de sus portafolios, buscando alianzas estratégicas (47%), considerando desinversiones o salidas a bolsa (44%) y priorizando la actividad de fusiones y adquisiciones (37%) para mantenerse competitivos en sectores clave.

La tecnología y la innovación son prioridades clave para los CEOs, con un 38% destacando su importancia para desarrollar nuevos modelos de negocio y obtener ventajas competitivas. Otros factores disruptivos incluyen la evolución de las necesidades del consumidor (36%), los cambios en el entorno económico y geopolítico (35%), y la presión sobre las cadenas de suministro (33%). El panorama empresarial subraya que la agilidad y la capacidad de anticiparse a los cambios serán esenciales para que las empresas sigan prosperando. Los CEOs, tanto en México como a nivel global, deben equilibrar riesgos geopolíticos y regulatorios mientras aprovechan las oportunidades emergentes.