Para Alejandro Besio, “el marketing es parte integral del negocio y sin él, el negocio no podría subsistir”. El vicepresidente de comunicaciones corporativas y marketing de Turner para los países hispanoparlantes de Latinoamérica considera que esto ocurre por la función del marketing, que es “vender un producto o servicio a un consumidor final y, a la vez, construir imagen de marca para que sea aspiracional”.

Desde su punto de vista, la tarea del marketing la convierte en una disciplina cuyo auge no se limita a la actualidad sino que es “permanente”.

-Esta noción, ¿se traduce en el lugar que ocupan los marketers dentro del management?

-Dependiendo de la industria, varía la relevancia. Si uno considera que el marketing es ventas, pero que es la venta más difícil, la más complicada –que es para influenciar al último eslabón de la cadena, que es el consumidor final– es fundamental. En consumo masivo y en retail es fundamental, y hay otras en las que se va ganando lugar poco a poco en función de los resultados.

-¿Es el marketing un ámbito preferencial para la innovación?

-La innovación es fundamental para poder generar algún tipo de impacto o para diferenciarse, para mostrarse de una manera diferente o, a la vez, alcanzar algún tipo de público al que en general no se puede llegar con actividades estándar que uno mantiene en su negocio. La innovación puede ser disruptiva o un poco más al detalle. Pero sí está presente, y es una herramienta principal y fundamental del marketing.

-¿Cree que el cambio digital puede convertirse en una amenaza para los marketeres o es todo oportunidad?

-La era digital es parte de un todo que el marketing lo puede capitalizar para seguir comunicando, promocionando y construyendo tanto sea marcas como productos.

Besio se unió a Turner en 2006 para liderar la comunicación en el Cono Sur. Asumió su posición actual en 2010, y desde entonces es responsable de la comunicación externa y la responsabilidad social de la empresa, y además es vocero ante los medios. También tiene a cargo la comunicación interna. Previamente, fue director de marketing de la emblemática Havanna durante dos años y de Ferrero durante 10, donde trabajó con marcas como Kinder Sorpresa, Tic Tac y Ferrero Rocher.