
Roberto Gnypek: “Una empresa debe facilitar el día a día del consumidor”
Roberto Gnypek trabajó durante ocho años en Sadia como gerente de marketing y lleva casi quince en McDonald’s: de 2003 a 2013 como director de marketing, y los últimos cuatro años como vicepresidente.
El marketer considera que las marcas deben adaptarse al consumidor y que el camino para ello es la innovación y el uso de las nuevas tecnologías. Para ilustrar esta afirmación explica cómo lo vienen haciendo en McDonald’s: “Todo el tiempo estamos haciendo cosas innovadoras, porque hoy el consumidor está pasando por un momento arduo y nuestro equipo debe adaptarse a esto. Traer innovaciones y una postura más cercana con el consumidor es algo fundamental”, asegura.
En esta política de innovaciones, la cadena está creando un nuevo concepto en restaurantes, como el McEvolution: “Cómo vamos a encarar este tema para Latinoamérica y Brasil es fundamental, porque es una forma única de agregar valor a la experiencia de nuestros consumidores, dentro de nuestros restaurantes”, reflexiona el VP, y agrega: “Ese es un cambio gigantesco y pasa mucho por la discusión de una adaptación, una absorción de la cultura digital dentro de la compañía. Es cultura digital con una visión de la comodidad. Porque nosotros somos comodidad, somos un restaurante de comida rápida que tiene como cualidades los servicios y la practividad: son los pilares esenciales de prestar servicio a nuestros consumidores”.
—Habla de agregar valor y experiencia al consumidor. ¿Esto es una respuesta a lo que ellos buscan que las marcas les ofrezcan?
—Hay un tema por encima de esto, un concepto profundo, no solamente en el uso de la tecnología, que hoy empieza a ser algo casi orgánico en nuestras vidas. Es sin dudas una forma de vivir una experiencia mejor o de generar tiempo de calidad para que disfrutemos mejor con los amigos y con la familia. La cuestión que está por arriba de la mesa es cómo las empresas asumen un rol de traer soluciones para el día a día del consumidor y generar esos momentos especiales. Porque la verdad es que hoy vivimos una vida muy intensa, y es posible que McDonald’s traiga soluciones que mejoren la calidad de vida de las personas, a través de sus productos y su experiencia, dentro de los restaurantes. Ese es el principal tema. La respuesta a esto es traer la tecnología al servicio de la comodidad, como decía antes. Para generar valor tenemos que posicionarnos así. Entonces todo el concepto de McEvolution está muy conectado con esta visión estratégica: son pedidos por pantalla, con un nuevo abordaje de quienes atienden para que reconozcan el momento del consumidor y que puedan hacerles un abordaje más personalizado.
—¿Sobre la sustentabilidad y el compromiso de las empresas qué puede decir?
—Hoy no basta para una marca pensar en sustentabilidad a mediano o largo plazo, sino asumir un papel para traer soluciones para el día a día del consumidor. Ya pasó el tiempo en que sólo producíamos algo, se vendía y ya. Las personas están tomando decisiones sobre empresas que están trayendo soluciones que mejoren el día a día de ellas. Con sus servicios y su experiencia, agregando valor para que disfruten su poco tiempo de una forma más cualitativa, más la visión estrategia por encima de todo. Muchas personas dicen que la tecnología va a hacer las cosas más frías, con menos contacto humano; pero yo no lo creo, y nuestro proyecto no es así, es opuesto. Hace muchos años había una atención con un speech y los consumidores querían otro tipo de atención y no un discurso para todos igual. Lo que decimos siempre es que McDonald’s va a cambiar teniendo en cuenta al consumidor. Somos una empresa global que busca, siempre, un ADN local.
—¿Cómo juegan esos valores de los que habla?¿Comulga con ellos?
—Sin dudas. Hay un tema fundamental: hoy el consumidor decide su compra cuando sus valores se conectan con los valores de la marca. Y nosotros, que trabajamos ahí, no podemos ser diferentes, no podemos trabajar si no creemos en la visión estratégica y en los valores. Sencillamente no podríamos estar aquí para construir el camino de mediano y largo plazo. Entonces, el éxito de un negocio está muy conectado con ser auténtico, ser transparente y no tener miedo de cambiar. Afortunadamente trabajamos en una empresa así. A la que le gusta aprender de sus errores y de sus aciertos. Tiene una escala mundial que nos permite intercambiar experiencias entre nosotros y compartir los valores practicados día a día por las personas. Es por eso que todos los días nos levantamos temprano y estamos acá motivados para ser mejores y participar de la vida de todas las personas.