La industria peruana de alimentos ha sumado un nuevo player en el último tiempo. Se trata de una idea proveniente del emprendedor Carlos Añaños, quien decidió crear una compañía con productos basados en el comercio justo y la trazabilidad de los procesos mediante tecnología blockchain.

Tiyapuy, como se denomina este proyecto, se lanzó con tres líneas: papas nativas, quinua y pastas. Nathalia Mateus, su chief marketing officer, dialogó con Marketers by Adlatina sobre el valor que está aportando esta empresa al mercado y la preocupación que existe en la población por incorporar comidas saludables y saber cómo llegan a su mesa.

—¿Cómo definiría la marca Tiyapuy? ¿Cuáles son sus objetivos?
—Es un sueño del reconocido emprendedor peruano Carlos Añaños y que hicimos realidad en pleno año de pandemia, de manera remota. Como ADN de la marca, nos propusimos que sean alimentos sanos, 100% de calidad y accesibles para cualquier persona en el mercado. Todo el origen de nuestros productos viene de los Andes peruanos: son alimentos milenarios y protegidos de cualquier cambio aditivo o acción del hombre. En este contexto, hay una preocupación por dar respuesta a la biodiversidad peruana: queremos respetar el proceso. Tenemos tres líneas de productos: snacks libres de octógonos, una línea nutritiva de pastas con harina 100% orgánica (son veganas, orgánicas y nutritivas) y una línea de quinua.

—¿Cómo influye la pandemia en un deseo de la gente por comer alimentos saludables?
—La reflexión del lanzamiento de Tiyapuy fue una: golpeados por una pandemia, la que nos hicimos fue cómo cuidamos nuestra salud. No es la pregunta de nosotros como empresa, sino de todos los consumidores. Todos pensamos: si me toca, ¿cómo responderá mi cuerpo? Por eso, tengo que ver cómo contribuyo para mejorar mi salud. Creo que detectamos un insight de que la gente quiere una mejor calidad de vida.

“Para cualquier persona, es bueno
saber de dónde viene lo que está
comiendo y cómo lo sembraron”

—¿Qué significa tener una trazabilidad de productos con tecnología blockchain?
—Quiere decir que tenemos certificado el producto desde que se produce hasta que llega a tus manos. Esta certificación demuestra al consumidor qué agricultor sembró la papa que está comiendo, dónde y cómo lo hizo. En Perú, somos los únicos en tener esta certificación que es muy exigente. Cualquier persona puede tomar un paquete de nuestras papas y, con el código QR, accederá al espectro de calidad blockchain que le dirá qué tipo de papa está consumiendo. Es una manera de mostrar la honestidad del producto y algo valioso: para cualquier persona, es bueno saber de dónde viene lo que está comiendo y cómo lo sembraron.

—¿Qué importancia le da el ámbito empresarial y los consumidores al comercio justo en Perú?
—Una de las cosas que estamos repensando ahora es que estamos valorando lo que tenemos y queremos pagarlo de manera justa. Cuando hablamos que los héroes son los médicos y enfermeros, también es bueno ver que hay otros héroes que son los agricultores. Nosotros trabajamos directamente con ellos y buscamos ponerles caras con representantes que denominamos héroes: hay uno de las papas, otro de las pastas y otro de la quinua. Les mostramos respeto reconociéndolos y queremos ser parte de la cadena para que ellos sigan protegiendo su biodiversidad.

—¿Por qué cree que las marcas deben hacer hincapié en sus procesos?
—Si se modifican los productos genéticamente, nos va a afectar a todos. Por eso, es una misión de las marcas impulsar este concepto: humanizar el proceso para que el consumidor entienda que detrás de los procesos hay personas. Queremos también inspirar a que el sector de los alimentos vire un poco el negocio y humanice sus estrategias. Está claro que como hemos hecho las cosas hasta hoy, con la economía lineal, las cosas no hay funcionado. Y ahora se viene un golpe duro que es el medioambiental.

—¿Qué grado de trascendencia le brindan los peruanos a la buena alimentación?
—Hay un grado de conciencia, pero también un potencial muy importante aún. Una oportunidad que tenemos es que los precios de los alimentos saludables son muy altos y por eso nosotros queremos que nuestros productos sean consumidos por personas de todos los niveles socioeconómicos. Esto es retador para nosotros y lo hemos logrado bajo un modelo de negocios win-win: ganemos todos y que nadie quede afectado en la cadena. Así llevamos los mejores productos al mejor precio posible. La conciencia nace también que tú puedas acceder a esta información para que sepas que estás comiendo algo sano.

“Para lanzar una marca en pandemia,
es clave impulsar la creatividad,
desaprender y tener confianza”

—¿Cómo es lanzar una marca en este contexto de pandemia? ¿Qué desafíos existen?
—Todos los días son desafíos diferentes: es enfrentarnos a no vernos. Queremos estar juntos, pero el principal aprendizaje fue tirar de la creatividad, desaprender y tener confianza: en la agencia y en el equipo de producción. Nosotros no podíamos entrar a Ayacucho, donde se producen nuestros alimentos, y tuvimos que confiar en el personal que estaba allí. Hay que entender que el ser humano es colectivo y eso implica en entregar a otro la responsabilidad. Quiero reconocer a nuestro equipo porque ha superado tantos retos y tantas barreras. Hoy tenemos dos plantas de producción con altos niveles de calidad y de certificación.

—¿Qué balance puede hacer sobre el lanzamiento hasta hoy? ¿Qué objetivos posee la empresa en el corto plazo?
—Nosotros iniciamos nuestro proceso a nivel comercial desde noviembre. Nos han recibido muy bien los distintos canales. Entienden que es un proyecto que tenemos mucho por hacer. Ese aval es lo que necesitan estos proyectos de emprendimiento. Mal o bien, somos eso. Aquí es donde nuestros socios dan un granito de arena. Hemos iniciado un proceso de ecommerce bastante interesante que nos está dando resultados interesantes en nuestra primera etapa. Una segunda etapa pasa por las exportaciones: nos están llamando de muchos países para llevar nuestros productos. ¿Qué mejor que te llame un mercado y que te invite a ser parte de eso? Tenemos un 2021 lleno de retos aún y estamos contentos por la buena recepción que hemos tenido, lo que demuestra que vamos por un buen camino.