Iván de Pineda: “Este programa quiere plantar una semilla de inquietud”
En una invitación a la prensa, Ivan de Pineda, el conductor de Un pequeño gran viaje en 48 horas, contó algunos detalles de la nueva temporada del programa.
En esta oportunidad, el recorrido será por la Argentina y recorrerá doce lugares. El primer destino fue Ushuaia. “Viajar por la Argentina es una gran responsabilidad, estás mostrando algo muy querido por todos ―comienza la charla De Pineda―. Una de las cosas que me da mucha alegría es que no sólo conozco el mundo, sino que a lo largo de muchos años tuve la posibilidad de viajar por la Argentina, con este programa y con un proyecto de cuando era chico: trabajaba en otra disciplina y me tocaba recorrer muchas provincias y lugares, y me parecía maravilloso”.
El conductor de Un pequeño gran viaje en 48 horas y de Pasapalabra (ambos programas se pueden ver por la pantalla de Telefe) confesó que su primer gran viaje fue cuando le tocó irse de Madrid a la Argentina, con todo lo que significa descubrir un montón de cosas nuevas y tener que adaptarse y cruzar un continente: “Era toda una aventura y empezar a conocer de sus paisajes, su idiosincrasia, sus tradiciones, el folklore de un país como la Argentina. Después, cuando viajé por el mundo me daba cuenta de cómo latía en la gente este país: su posición geográfica, su historia, sus lugares. La Argentina ha tenido grandes embajadores, campeones. Es la última frontera. Hay tanto para ver, para conocer”.
Para él, la premisa de este programa es que “cuando lo veas puedas entretenerte, divertirte, que te llene. A través de lo visual, de la historia, de la postal, de las imágenes que son alucinantes. Después, que ponga una semilla, la semilla de la inquietud que digas ‘cómo me gustaría’. Siempre digo que los primeros viajes son los que suceden en tu cabeza; después, cuando lo empezás a organizar. Luego viajás y el tiempo pasa muy rápido”.
Hay marcas que suelen seguirlo: al respecto, y en relación al lugar de los anunciantes en el contenido del programa, comenta: “Es muy importante el trabajo en equipo. Acá hay un ida y vuelta constante en la generación de ese lugar, de ese punto medio en que podemos encontrar la sinergia, a través de un contenido, de la artística y de la implementación de las ideas. A partir de ahí se trabaja mucho en cómo hacer que las implementaciones sean muy orgánicas y que al mismo tiempo tengan un rol dentro de la historia, que todo tenga un propósito y que el contenido pueda ayudarte y colaborar para comunicar”.
De Pineda se caracteriza por interesarse y estudiar los caminos por los que va a ir: “Soy una esponja”, reconoce. Además, considera cruciales las charlas con los lugareños: “Los momentos que generamos son momentos que te vinculan. Si llego a un lugar, puedo charlar y generar un ida y vuelta con algo que me estás contando, generamos ese vínculo; entonces puedo meterme más con esos temas que te hacen quien sos. Se trata de tener la mente abierta”.


